Trabajar habilidades socioemocionales en el aula.
Las experiencias realizadas muestran que SEL no solo ayuda a mejorar al alumnado a nivel académico sino que, éstos mejoran en sus relaciones y comportamientos sociales (empatía, colaboración); así como en la visión que tiene hacia el centro de formación. (Durlak et al., 2011)
Implementar este tipo de enfoque ayudará a los alumnos a desarrollar habilidades como:
Conocerse a uno mismo aprendiendo a reconocer las fortalezas y limitaciones que se tienen. Desarrollando actitudes positivas y de trabajo eficaz.
Autocontrol para saber regular las emociones y comportamientos. Algo muy importante para ser capaces de manejar el estrés, controlar la impulsividad y la frustración.
Habilidades sociales y la capacidad de comprender a los demás, empatizar y reconocer otras opiniones, situaciones, costumbres o culturas.
Toma de decisiones de manera responsable para elegir actuar de forma constructiva y siendo consciente de las consecuencias que toda decisión implica.
Actividades que ayudan a dar un enfoque SEL a nuestra metodología.
Mindfulness
Las ventajas de su uso van desde la mejora de la memoria hasta la disminución de la sensación de estrés.
- Visualizar el estrés para así bajar su nivel: pide a tus alumnos que imaginen qué aspecto tiene el estrés y cómo lo experimentan en su caso concreto. Una vez localizado, pídeles que lo liberen.
- Aislar el ruido: hay un número importante de sonidos que se escuchan desde la clase; otros alumnos por el pasillo, ruido del exterior, etc. Haz que tus alumnos se concentren en uno de esos sonidos y que lo describan y que recuerden la última vez que lo escucharon y les despistó o les hizo pensar en algo concreto.
¿Qué emoción traes hoy a clase?
Pide a los alumnos que compartan su estado de ánimo resumido en una emoción. Esta aparentemente sencilla actividad, ayudará a que se conozcan mejor lo cual favorecerá el clima de trabajo.
¡Fuera las inseguridades!
Los alumnos escribirán en un trozo de papel sus expectativas para el curso, trimestre, en relación al un tema concreto, etc. Añaden las inseguridades que éstas les causan. A continuación arrugan el papel con fuerza y lo tiran a la papelera. Este acto, simbólico lleva solo 3 minutos pero puede ser un buen punto de partida para algunas de las clases.
Actitud en evolución y receptiva frente a actitud cerrada a los cambios.
Haz que los alumnos sean conscientes de los momentos en los que se enfrentan a situaciones del día a día con un tipo de actitud u otro.
- Tener una actitud en desarrollo que evoluciona y es receptiva al cambio, supone creer que puedes mejorar, desarrollar tus habilidades y puntos fuertes a través del esfuerzo y del trabajo constante, haciendo uso de estrategias positivas y contando con la ayuda de los demás.
- Desarrollar la actitud estática y fija, es creer que las habilidades y talentos son los que tenemos y con los que nacemos. Se consideran inalterables por lo que no los podremos mejorar.
La actitud en crecimiento puede tener un efecto muy positivo a la hora de motivar a los alumnos. La experiencia en centros donde se trabaja (growth mindset) es, comprobar que los alumnos mejoran su atención, desarrollar una mayor capacidad para perseverar en la tarea, un mejor aprendizaje y de más calidad lo que contribuye de manera directa a alcanzar el éxito académico.