Definición legal de robótica
Cada vez estamos más cerca de crear un robot con plenas capacidades asemejadas a las humanas. Se trata de un campo de investigación diferente al habitual, y no podemos olvidar los cambios legales, sociales y éticos que esto implica.
Para Javier Antonio Nisa Ávila, Fundador y consultor en Derecho de Tecnologías avanzadas e Inteligencia Artificial en LeXnos Corporation, ‘deberíamos definir tanto sociológicamente como jurídicamente que es un robot o la robótica’.
“Sociológicamente la robótica sería todo aquello incapaz de aparecer de manera espontánea fuera del hábitat del ser humano o de cualquier derivación de dicho hábitat y que tiene una relación socio-técnica con los integrantes de una sociedad y presenta profundas interacciones con los mismos”.
La definición jurídica de robótica es más compleja de lo que parece, puesto que prácticamente no existe una legislación exacta en ningún país que defina qué es un robot más allá de un vago concepto jurídico que tenemos derivado de la maquinaria actual existente en cadenas de montaje o temas sanitarios o militares; donde dicha maquinaria podría considerarse un robot. Pero un robot dentro del escalón más bajo en robótica al ser únicamente maquinaria sofisticada. La ciencia robótica va mucho más allá y de la esfera jurídica se debería de esperar lo mismo.
Existen cuatro niveles, categorías o conceptos de robots existentes, y que es necesario regular jurídicamente.
- NIVEL 1: Sistemas inteligentes programados.
- NIVEL 2: Robots no autónomos.
- NIVEL 3: Robots autónomos.
- NIVEL 4: Inteligencia Artificial.
Finalmente podemos definir legalmente a la robótica como el:
«compendio de mecanismos, hardware y software con capacidad de toma de decisiones asistida o no asistida para el desarrollo de tareas y funciones programadas por un operador humano, el desarrollo de tareas indicadas por seres humanos o ejecución de tareas, incluyendo a aquellos que, con condiciones de funcionamiento bajo libre albedrío y programados bajo inteligencia artificial, sean capaces de seguir unos objetivos; siempre en todo caso para fines socialmente correctos no violentos, ni nocivos; ni para humanos ni para los propios robots».
La pregunta que nos hacemos la planteábamos cómo título del post: ¿Estamos preparados para la robótica?
Para profundizar en este tema puedes consultar este enlace.